El concepto de espiral dinámica fue desarrollado por Don Beck y Chris Cowan basándose en las teorías de Clare W. Graves y presentado en 1996 en un libro del mismo nombre (última edición 2014). El modelo fue diseñado originalmente para comunicar las ideas de Graves a una audiencia de gerentes, pero debido a la facilidad con la que el modelo captura la cultura y la psique de los grupos humanos, también ha encontrado otros promotores y objetivos (Wikipedia).
El año 2020 brilla con lo que se podría describir como un caos organizativo creado directamente por políticos electos. Sin embargo, nada más lejos de la verdad. Estamos llegando al final de un período de transición que, a raíz de la Segunda Guerra Mundial, no solo reestructurará a los países en profundidad, sino que también los llevará del punto A al punto B. Y en esta mutación, TODOS los aspectos de la vida en la tierra necesitaba ser revisada y enmendada. Este es el gran RESET. Tómese el tiempo para escuchar al Sr. Klaus Schwaab, el jefe del Foro Económico Mundial. Lo dice todo.
En junio de 2015, les anuncié el fenómeno, aunque de lejos no tengo todos los datos que puedo tener hoy. Pero una serie de observaciones me llevaron a hacer este análisis.
https://lilianeheldkhawam.com/2015/06/21/la-grande-mue-de-letat-nation-a-un-etat-transnational-par-liliane-held-khawam/
Una gran muda ha golpeado al planeta. La nueva creación está emergiendo y se está imponiendo a todos. Y no es necesariamente una mariposa.
Toda la política de los bancos centrales anunciaba una especie de liquidación general de las monedas nacionales y de los ahorros de los ciudadanos. La élite emergente se ha construido un mundo nuevo para sí misma, con sus Frankensteins en ciernes, con la riqueza de los estados, los bancos, las entidades no bancarias y los ciudadanos. Un truco ahumado, preciso y una inteligencia formidable.
El último acto de la transformación se encuentra actualmente en la forma de una revolución social que tiene como objetivo establecer una "sociedad" matemática, supuestamente dirigida por la ciencia.
De hecho, la empresa se encuentra en proceso de liquidación. Los símbolos se suceden y se complementan. Estamos viviendo una liquidación social a imagen y semejanza de lo que afectó al mundo financiero, que no es más que un saqueo del mercado monetario-financiero real por parte de un puñado de individuos a los que nos abstendremos de calificar aquí.
El ejemplo de la contención es una forma de romper los lazos sociales que unen una carrera. Se invita a las personas a entregarse a sí mismas. Y el colmo de la perversión, a algunos se les paga a pesar del cese de actividad. Peor que eso durante las semanas de encierro, al menos en Suiza, el tiempo fue excesivamente bueno, dando la impresión de estar de vacaciones pagadas. La realidad es que este cese de actividades económicas, tarde o temprano conducirá a la quiebra de aquellos que habían escapado de las garras de los fagocitantes del mundo financiero. La probabilidad de perder su autonomía financiera y profesional se vuelve significativa, por no decir casi segura. En última instancia, la dependencia, incluida la alimentación , frente a terceros aumentará hasta convertirse en existencial.
https://www.businessinsider.fr/us/social-distancing-in-africa-could-contribute-to-food-shortages-2020-4
El distanciamiento social del trazado rayado como paquete de DHL ha generado un doble miedo frente a frente. Primero, el de contraer este virus del que no entendemos nada por un humo político-mediático casi continuo. Luego está este miedo a ser contactado en cualquier momento para ser sometido a los procedimientos de un Task Force, algunos miembros influyentes de los cuales son cercanos al negocio Big Pharma, y que tiene todas las facultades para infligirle el tratamiento reservado en el pasado. a las víctimas de la plaga. Así que el distanciamiento social te aislará físicamente, pero también psíquicamente a medida que aumenta el miedo al otro.
La máscara finalmente, una herramienta beneficiosa cuando se usa de la manera, se convierte en un arma de destrucción social. La máscara tenderá a desidentificar físicamente al individuo que es más difícil de reconocer por su red social. Además, la máscara distorsionará la voz, otra señal de identificación. En definitiva, la máscara contribuye a una pérdida de identidad, como el trato que se le ha administrado a Estados, territorios y empresas.
Recuerde, estas entidades tuvieron que ser despojadas de su identidad. ¿Por qué? Porque una identidad fuerte dificulta el dominio de la organización que caracteriza, ya sea una empresa o un individuo.
Podríamos haber multiplicado las observaciones. Pero estos tres sencillos aspectos permiten anonimizar a los humanos. ¿Por qué? ¿Para globalizarlos mejor? Quizás ... ¿Para dominarlos mejor? Seguramente.
Entonces surgen muchas preguntas en esta etapa. Estos son los mismos que he estado posando durante muchos años. ¿Qué será de las personas vulnerables: ancianas, discapacitadas, enfermas o hambrientas? ¿Qué será del concepto de familia? ¿Se irá por el camino? Hay riesgos de que no sea del gusto del Nuevo Mundo. La familia siendo un referente identitario, se puede erradicar.
Después de la crisis de Covid, ¿qué quedará de la sociedad tal como la conocemos? ¿Qué quedará de la familia? ¿Qué quedará de la pareja? Es urgente proyectar las demandas tiránicas impuestas a toda la humanidad en nombre de un virus que por el momento no puede justificar la matanza de la vida de la sociedad.
Me permito poner a continuación la introducción de mi libro Planetary Coup d'Etat. Es imperativo que tantas personas como sea posible comprendan los peligros potenciales que amenazan a la humanidad.
LHK
Introducción del golpe planetario
Un mundo se va, otro viene. Entre las dos, siete décadas se han desarrollado una transición que se ha presentado en forma de globalización, liderada por una economía de mercado, en un contexto de miedo al dragón chino. La realidad es diferente, y se puede resumir con una advertencia: “La ruta de navegación, a través del laberinto de nuestros problemas actuales, es el fenómeno de su globalización. O aceptaremos compensaciones globales como resultado de los cálculos de la razón humana respaldados por la computadora, o todos nos perderemos en la búsqueda egoísta de nuestros intereses nacionales y regionales. [1] Esta afirmación está tomada del informe del Club de Roma, un poderoso grupo de expertos que asocia a un gran número de industriales, economistas, científicos, altos funcionarios nacionales e internacionales, incluidos reyes y reinas. Su presidente fundador fue Aurelio Peccei , el jefe de Fiat.
La espectacular reestructuración actual del planeta deriva de la creencia promocionada por una determinada comunidad de que la gestión del mundo es un asunto colectivo, que debe gestionarse de forma global, más allá de los Estados y los ciudadanos. Para ello sería necesaria una gestión inspirada en la de la empresa. Además, debe centrarse en una ingeniería que permita la computadora, o más generalmente la máquina de información. Sin embargo, todavía de acuerdo con esta creencia, para lograr la máxima racionalización del proceso de toma de decisiones, es necesario colectivizar los recursos planetarios. A esta doctrina se le ha dado el nombre de desarrollo sostenible, el hilo conductor del nuevo mundo.
Así, desde la caída del Muro de Berlín y la llegada del mercado financiero global, coexisten dos procesos. La primera es la que precipita al fondo de los océanos el concepto de Estado, su Constitución, sus legislaciones, su democracia, así como la condición de ciudadano. El segundo que surge simultáneamente de las computadoras de los tecnócratas supranacionales es el de un sistema que se otorga a través de contratos un territorio planetario unificado, aunque virtualizado y tejido por un número infinito de interrelaciones e interdependencias. Se insta a la humanidad a "echar raíces" allí para bien o para mal.
El proyecto del nuevo mundo, nunca presentado al público en su versión final, debe necesariamente haber provocado el fin de los Estados, de sus posesiones, de su soberanía territorial, de su poder público, así como de los asuntos públicos en general. Sin embargo, antes de ponerle fin definitivamente, era necesario asegurar que los atributos y la riqueza de los Estados fueran transferidos a la oligarquía supranacional, garante del nuevo mundo.
A la cabeza de esta oligarquía están los beneficiarios finales de la mortal deuda del planeta. Estos individuos son desconocidos. Gracias al silencio de los medios de investigación, y a una barrera infranqueable formada por un número infinito de estructuras, tanto supra como subnacionales, dotadas de personalidades jurídicas perfectamente anónimas, estos conquistadores del mundo permanecen en las sombras. Aunque su identidad es inaccesible, el hecho es que estos individuos necesariamente existen y se benefician del elemento central que les permite conquistar el mundo: el señoreaje del dinero. De hecho, los beneficios de la confiscación de la creación monetaria del planeta por parte de los nuevos señores son incalculables. Nuestra hipótesis de trabajo básica es que pudieron, gracias a este privilegio soberano transmitido por todos los países, de apropiarse del planeta y sus recursos, incluidos los humanos. Dotado de un poder global holístico, estos maestros de un género sin precedentes impondrán un nuevo paradigma, oreiniciar , en todas las áreas del mundo. Para 2030 a más tardar, el nuevo mundo debe estar operativo.
Por tanto, nos encontramos en una encrucijada. Los modelos monetario, financiero, económico, territorial, educativo o cultural del viejo mundo están en proceso de liquidación. Sin embargo, la riqueza asociada ha sido capturada por una oligarquía privada y corporativa, que toma el control de todas las palancas. Al mismo tiempo, está tratando de unificar el planeta bajo pretextos mesiánicos, a los que se adjuntan los programas de desarrollo. Por ahora, hemos visto que el concepto genera decrepitud para la humanidad y el planeta. En contraste, existe la micro-élite dotada de señoreaje que disfruta de una prosperidad histórica. Todo depende de qué lado tomemos para evaluar la diferencia entre los resultados prometidos y los observados.
Para alcanzar el nuevo paradigma, los señores establecieron una revolución social en la que la humanidad corre el riesgo de perder sus últimas libertades y derechos, en particular el derecho a la propiedad privada. Al hacerlo, dependerá del sistema ubicuo para su sustento. Se pondrá a disposición del propietario un ingreso universal y una economía colaborativa a cambio de los servicios prestados a la comunidad .
Una élite bastante grande, que abarca muchos sectores, participó en el desarrollo del proyecto. Sin embargo, una vez que se establezca el nuevo mundo, el tamaño de las élites se reducirá drásticamente. Muchos líderes actuales pueden verse incluidos como simples miembros de comunidades locales con ingresos universales. El destino de Carlos Ghosn está ahí para testificar. Bill Gates comienza a ser atacado por algunos medios financiarizados.
Nada puede ser más normal, si se hace referencia a este esclarecido comentario del presidente Pérès: “Es el fin de un sistema. Hay una economía global pero no hay un gobierno global. En el nuevo mundo, ya no podemos liderar, debemos servir. Los gobiernos actuales producen desigualdad social en lugar de reducirla. "
De hecho, la organización jerárquica y el concepto de autoridad se volverán innecesarios en el nuevo modelo social, en el que el blockchain jugará un papel preponderante en el encadenamiento de la humanidad. Sin embargo, este cibersistema está construido de manera perfectamente transversal, y excluye cualquier jerarquía, autoridad e incluso cualquier tercero de confianza (notario, juez, etc.). El control, las directivas, la uniformidad y la gestión de las poblaciones provienen de un ciberesistema omnipresente, incluso represivo, alimentado a su vez por la élite. La gestión de la humanidad dará paso a una interfaz tecnológica, que será casi imposible de superar.
Por eso es urgente transformar las administraciones públicas en e-gobiernos. Posteriormente, un entrelazamiento de las ciber administraciones locales conducirá a un imperio cibernético que cubrirá todos los rincones del planeta. Este modelo, que se propone conquistar el mundo con ciencia y tecnología para las armas, y para los soldados de los tecnócratas, es único en la historia. Zbigniew Brzezinski, asesor de seguridad nacional de Jimmy Carter de 1977 a 1981, le dio un nombre: la revolución tecnotrónica.
Poco antes de su muerte, M Pérès dirá: “Estamos pasando de la era de las tierras y las guerras a una era nueva, totalmente diferente, basada en la ciencia. La ciencia no es algo que se pueda conquistar por la fuerza. No puedes quitárselo a nadie, no necesitas debilitar a nadie [2] . "
Esto es exactamente por lo que estamos pasando sin saberlo.
De hecho, la tecnología parece ser la herramienta actual de conquista. Sin embargo, sin querer negar el asunto, la realidad sigue siendo más compleja. Un equipo multidisciplinar, pluricultural y pluriideológico trabajó en el modelo. Esta mezcla de géneros, que quisiera unificar, globalizar el planeta a través de las finanzas, la tecnología, la actividad y los procesos de toma de decisiones, así como a través de estándares, parece indigerible. Él mismo explica por qué la gente no vio venir nada.
Curiosamente, nos remite a una visión que tuvo el profeta Daniel de una estatua que representaba a un coloso con pies de barro. “Oh rey, miraste y viste una gran estatua; esta estatua era inmensa y de extraordinario esplendor; estaba parada frente a ti y su apariencia era terrible. La cabeza de esta estatua era de oro puro; su pecho y sus brazos eran plateados; su vientre y sus muslos eran de bronce; sus piernas, de hierro; sus pies, en parte de hierro y en parte de barro ". [3] .
Para el profeta, el imperio babilónico de entonces correspondía a la cabeza hecha de oro puro. Un imperio dotado de riquezas tangibles. Algunos eruditos y críticos ven en las siguientes tres partes del Coloso el surgimiento y desaparición de los imperios persa, griego y romano. Quedan los pies del Coloso que corresponderían a un imperio venidero, afectado por graves debilidades por su naturaleza.
En esta visión, nos sorprende la calidad cada vez menor de los materiales que simbolizan los imperios seleccionados. Esta depreciación del valor de los materiales a lo largo de los siglos es coherente con las observaciones realizadas en Dispossession [4] . Vimos allí cómo el valor de la riqueza se había diluido con el tiempo por aquellos en el mercado financiero. Estos han inundado el planeta con dinero inconsistente y productos financieros riesgosos. Junto con la dilución del valor monetario, las mismas manos se han apoderado de la riqueza tangible controlando la deuda. Colectivizados, luego capturados, estos fueron puestos fuera del alcance de la población.
Llama la atención el nivel de mediocridad de los materiales utilizados para los pies del Colossus. Como ahora, los iniciadores del nuevo imperio no parecen tener los medios para su ambición. Se ven obligados a adulterar su actuación, una realidad que a diario se confirma con escándalos de todo tipo. Además, los políticos de derecha e izquierda ofrecen al espectador una imagen negativa, plagada de empresarialismo por supuesto, pero sobre todo por su grado de desamparo y amateurismo.
Cabe señalar que la globalización tiene como objetivo integrar poblaciones que divergen bastante en cuanto a culturas, ideologías, religiones, operaciones, etc. ¿Cómo, por ejemplo, podemos unir a socialistas y ultraliberales durante mucho tiempo? A través de diversos y variados acuerdos forjados por líderes de todas las líneas políticas, económicas y religiosas. La globalización, por el momento , ha logrado integrar las diversas fuerzas a las que todo se opone en tiempos normales. Asimismo, Daniel le dirá al rey: “Tú has visto hierro mezclado con barro, porque serán mezclados por alianzas humanas; pero no se unirán entre sí, como el hierro no se combina con el barro. »Al igual que la improbable alianza del barro con el hierro, el sistema globalizador del siglo XXIsiglo lleva consigo las semillas de su colapso.
El simbolismo de dos pies también es interesante por su estructura horizontal, porque el ciberimperio contemporáneo también es transversal, ya que está basado en sistemas informáticos. No le importan las fronteras y otras barreras aduaneras. Las estructuras verticales de los estados se han vuelto inoperantes y están dando paso a sistemas complejos y multidimensionales dominados por la horizontalidad. Un mundo virtual, compuesto por sistemas, redes e interconexiones, conectando miríadas de puntos Norte-Sur y Este-Oeste sin preocuparse por ideologías culturales, religiosas o políticas de derecha o izquierda.
Por cierto, el Club de Roma [5] había dividido el mundo en 10 regiones. Un informe de la ONU hizo lo mismo en 2009 [6] . Podemos verlo como un guiño a los 10 dedos de los pies… Página 62 http://documents.irevues.inist.fr/handle/2042/30353?show=fullopen PDF La globalización, que está evolucionando hacia la globalización, no es el resultado de un accidente en la historia. Esta es una voluntad política que ha durado al menos durante décadas, y nada tiene que ver con un peligro que representarían China o Rusia. Veremos que fue iniciado y pilotado, desde el día después de la Segunda Guerra Mundial, por un determinado mundo empresarial anglosajón. Esto explica por qué la nueva estructura se basa en el modelo de empresa y denigra lo público. Actualmente, la humanidad corre el riesgo de entrar de lleno en un modelo de negocio.donde, en el mejor de los casos, se lo considera un recurso productivo y, en el peor, como una mercancía a explotar. Situación insostenible por tanto. Si eso sucediera, estaríamos enfrentando la peor (ciber) dictadura que jamás haya existido. Gestionar a la humanidad como recursos humanos es una herejía que debe evitarse por completo.
En este trabajo buscamos esclarecer los mecanismos que demuestran cómo, bajo el liderazgo de lo que erróneamente se llama mercado, el nuevo mundo reemplaza al viejo desintegrándolo tanto a nivel de identidad y territorio, como a nivel de procesos productivos. . riqueza, utilizando tecnología de la información. También nos gustaría demostrar cómo el mundo abandona los asuntos públicos para avanzar hacia una mercantilización y corporativización del planeta bajo el liderazgo de entidades privadas, descrita en Dispossession .
El puesto financiero muy serio [7]predice que para 2028, si todo saliera bien, Blackrock y Vanguard mantendrían casi todo con 20 billones de activos. Al mismo tiempo, cuando los medios financiarizados señalan con el dedo a los burgueses de Neuilly o los ingresos de los médicos, se necesita un imperio privado. Y a diferencia de cualquiera de los anteriores, abarcaría todos los elementos de la tierra, el aire, los océanos y ... la humanidad misma. Esta hiperestructura productivista, hipernormada, virtual y libre de Estados surge en una formidable discreción. Cuenta con una gobernanza altamente estandarizada y un solo administrador de todos los recursos centralizados (territorial, minero, humano, técnico, productivo, etc.). Nada parece poder perturbar su advenimiento.
El modelo que se está armando parece tan inteligente y tan eficiente que podría enviar de vuelta al vestuario a los grandes potentados de la historia. Pero este modelo también parece destructivo por ser eugenésico, liberticida e incluso ecocida . Escondida detrás de otro uso indebido del nombre, una jugosa empresa verde, respaldada por subsidios de todo tipo, está experimentando un auge excepcional. Naomi Klein criticó duramente a la ONG TNC, The Nature Conservancy, por sus vínculos con empresas de extracción de combustibles fósiles, incluidos grandes bancos de inversión. Hace unos años, TNC contrató a un comisario europeo griego saliente [8]para convertirla en su directora general mundial del sector de los océanos. Información que nos recuerda los enormes depósitos de hidrocarburos frente a Grecia ...
Gracias a estas "puertas giratorias" [9] o al lujoso reciclaje de líderes políticos en las altas finanzas y viceversa, las empresas dictan regulaciones y estándares a un mundo político corrupto.
Un mundo nuevo prospera lejos de la ira y la inseguridad de los pueblos, que la oligarquía se ha cuidado de alimentar. Detrás de las declaraciones de buenas intenciones continúa una destrucción de la vida en la tierra, facilitada por el colapso de la autoridad estatal y la corrupción de sus representantes. Los jóvenes que se rebelan contra la destrucción de la naturaleza, harían bien en mirar el lado bueno ...
Entonces, ¿este sistema está a salvo de lo inesperado? Solo haría falta un rechazo de China o una desagradable tormenta solar que paralizaría la máquina de la información (sistema global de tecnología de la información y la comunicación). Finalmente, en la medida en que la información es su principal combustible, el aumento de la opinión pública disidente podría amenazar el sistema ...
Por su parte, la estatua de Daniel será golpeada exactamente a la altura de su talón de Aquiles. Pies. “Estabas mirando cuando una piedra se soltó sin la ayuda de ninguna mano, golpeó los pies de hierro y arcilla de la estatua y los hizo pedazos. Entonces el hierro, el barro, el bronce, la plata y el oro se quebraron y se volvieron como paja que se escapa de la era en verano; el viento se los llevó y no se encontró ningún rastro. Pero la piedra que había golpeado la estatua se convirtió en una gran montaña y llenó toda la tierra. Informe sobre los
Objetivos de Desarrollo del Milenio, p. 55 https://www.un.org/millenniumgoals/pdf/MDG_Report_2009_ENG.pdf
Sin embargo, antes de su caída, el nuevo imperio corre el riesgo de tener algunas sorpresas reservadas para nosotros, por ejemplo, con un gobierno totalitario, incluso fascista. La advertencia viene del propio Bénito Mussolini cuando define el fascismo. Dirá: "El fascismo debería llamarse más bien corporativismo, ya que de hecho es la integración de los poderes del Estado y los poderes de los mercados ". Esto se relaciona con el senador T. Bone cuando declaró el 4 de junio de 1943 al Comité de Asuntos Militares del Senado de los Estados Unidos: "Farben era Hitler y Hitler era Farben ".
