En una palabra, los jóvenes españoles se definen como la generación ‘perdida’ (con 467 votos), por delante de la generación ‘del cambio’ (210 votos), según revela la encuesta ‘Generation What?’, realizada de forma simultánea en 12 países de Europa, por 16 cadenas de radio y televisión públicas, y dirigida a saber qué piensan, sienten y esperan de la vida la ‘Generación Millennial’.
Hablar de ‘Generación Millennial’ es hablar de los jóvenes nacidos entre los ochenta y principios de 2000 –aquellos de entre 16 y 35 años–, que se hicieron adultos en plena prosperidad económica antes de la crisis y son denominados ‘nativos digitales’, por su dominio y dependencia de la tecnología.
Esta encuesta recoge las opiniones de los jóvenes españoles respecto al trabajo, la economía, la política, el amor, la educación, la familia, las drogas, la situación del país y de Europa o cómo ven su futuro, entre un total de 149 preguntas.
‘Generation What?’ es una iniciativa respaldada en España por RTVE, que plantea una macroencuesta –que permanecerá online hasta marzo de 2017– donde los jóvenes de cada uno de los países participantes –Alemania, Austria, Bélgica, Francia, Grecia, Holanda, Irlanda, Italia, Gales y República Checa– podrán contestar libremente y sin necesidad de identificación. Las cuestiones ofrecen resultados a tiempo real, y pretenden retratar el presente y el futuro de los Millennials.
Este proyecto comenzó como un programa piloto en Francia y ahora ha visto la luz convertido en una iniciativa conjunta de 16 cadenas de radio y televisión públicas europeas. Su objetivo es convertir los datos obtenidos formatos y contenidos adaptados, desde los medios participantes, a las necesidades e intereses de esta generación.
¿QUÉ PREOCUPA Y HACE FELICES A LOS MILLENNIALS?
De las preguntas, que ya han respondido más de 9.000 jóvenes españoles, se desprende que el 69 por ciento de los participantes no podría ser feliz sin un trabajo, que un 42 por ciento considera que su futuro será peor que el de sus padres o que para el 36 por ciento, no todo el mundo tiene “su oportunidad” en el sistema educativo actual.
Respecto a su futuro se muestran cautos, sin llegar a reflejar un optimismo desbordado. Mientras que un 49 por ciento valora que le espera un futuro aceptable, un 31 por ciento se sitúa más cerca del pesimismo.
En base a la situación presente, el 73 por ciento se muestra contrario de culpar a las generaciones pasadas de los problemas que afronta la juventud hoy en día.
No podían faltar las referencias al trabajo. Para el 85 por ciento de los jóvenes que han rellenado el cuestionario el trabajo es lo más importante en su vida en la actualidad y un 62 por ciento ve el trabajo como “una vía de realización personal”, frente al 38 por ciento que señala que se trata de “un sinónimo de ganar dinero”.
En general, la población más joven suele reconocer que cuentan con una formación académica superior al empleo que realizan. Sin embargo, en esta encuesta, una mayoría (el 40 por ciento) asegura que el puesto que ocupa está al mismo nivel que su formación y un 53 por ciento se siente realizado en su actual trabajo. En el sueldo es donde se muestran más críticos, pues el 49 por ciento señala que su sueldo no es “en absoluto” acorde a su preparación.
En esta línea, responden al problema de la crisis. Los jóvenes se muestran positivos respecto a la mejora de la economía y un 74 por ciento cree que va a vivir una situación diferente a la actual de crisis económica. La situación económica personal se sitúa entre “pasable” y “un poco ajustada” para el 29 por ciento en ambos casos; y el 54 por ciento reconoce que no podría ser feliz con problemas económicos.
Otra de las preocupaciones de los Millennials es la Educación. Un 78 por ciento de los que han respondido a esta encuesta asegura que el sistema educativo no prepara adecuadamente para el mercado laboral y el 70 por ciento considera que tampoco premia el mérito de los estudiantes.
La política, las organizaciones religiosas, los medios de comunicación o los banqueros, tampoco se salvan de las críticas de los jóvenes. El 47 por ciento no confía “en absoluto” es la política y el 99 por ciento cree que los políticos son corruptos; el 62 por ciento no confía “en absoluto” en las asociaciones religiosas; el 82 por ciento no confía en los medios de comunicación y el 61 por ciento reconoce que podría ser feliz sin las noticias; y el 94 por ciento está convencido de que los bancos y el dinero gobiernan el mundo.
En definitiva, la ‘Generación Millennial’ se siente “europea”, valora la libertad, apuesta por la apertura de las fronteras y por la inmigración para enriquecer las culturas.
También creen en el amor, pues el 79 por ciento no podría ser feliz sin el, aunque piensan que el matrimonio es solo “un trozo de papel” (el 46 por ciento); y un 70 por ciento no podría ser feliz sin sexo. Aunque resulte extraño, los Millennials podrían ser felices sin móviles (el 70 por ciento) y sin Internet (el 56 por ciento), pero no se plantean eliminar de su vida la música (85 por ciento), los libros (77 por ciento) o el cine y las series de televisión (63 por ciento).
Pero, ¿realmente estamos ante una “generación perdida” o se trata de una generación abandonada por una sociedad que les considera unos vagos?. Desde el punto de vista de los jóvenes que han participado en esta macroencuesta, queda en evidencia la falta de apoyo que sienten por parte de la sociedad –el 73 por ciento lamenta que no se le da la oportunidad de demostrar de lo que es capaz–. Así como el abandono del sistema educativo en la preparación al mundo laboral o las pocas probabilidades de lograr una situación económica digna y acorde a su formación.
Fuente: Europa Press