Subir el pico más alto del planeta es una hazaña que no muchos pueden llevar a cabo. Sin embargo, el estudio Sólfar ha hecho posible que cualquiera logre tal hazaña, mediante la creación de un software de realidad virtual.
La nueva experiencia de realidad virtual Everest VR permite a los usuarios "explorar" el monte Everest con sus más de 8.000 metros de altura sobre el nivel del mar. Ofrece una experiencia de 360 grados en la que seremos capaces de arrancar cuerdas y manejar hachas de hielo mientras "subimos" a la cumbre.
Esta tecnología, desarrollada por Islandia Solfar Studios y la compañía de efectos visuales RVX, ha sido denominada Everest VR. Cuesta unos trece euros, pero requiere un auricular de realidad virtual cuyo precio es bastante más elevado, y una potente computadora para ejecutar el software de Windows.
Este viaje virtual incluye cinco etapas separadas: la preparación en Basecamp, atravesando las cascadas de Khumbu, pasar una noche en el campamento 4, ascender el peligroso Paso Hillary y finalmente, la conquista de la cumbre del Everest.
Además, cuenta con dieciocho de las rutas más conocidas y utilizadas para alcanzar la cumbre de la montaña, y la oportunidad de utilizar una serie de estrategias para alcanzarla.
Una vez completados estas cinco etapas el usuario puede desbloquear el modo 'Dios’, que permite al aventurero levantarse e incorporarse cual torre sobre la cordillera para explorarlo desde todos los ángulos. Ver todo lo que ha andado, los obstáculos superados y disfrutar de una imponente vista virtual. Pensemos en ello como un si fuera una forma de tele transportarnos virtualmente.
Como no podía ser de otra forma, también tiene insertado material fotográfico de la primera expedición exitosa a la cima en el año 1953. Dicho material lo ha proporcionado la Royal Geographical Society de Londres, en las diversas etapas de la experiencia.
Estas imágenes captan al viajero neozelandés Edmund Hillary y al viajero nepalés Tenzing Norgay, representados, y se colocan en los puntos reales donde las fotos fueron tomadas originalmente. De esta forma mientras ascendemos exitosamente el monte Everest, veremos a dos grandes hitos de la aventura de montaña haciendo lo propio.
Cierto es que este ascenso de realidad virtual promete ser intrigante y espectacular, aunque eliminemos el factor de riesgo en nuestra expedición. De nuevo, si echamos la vista atrás y pensamos en Hillary y Norgay, es vertiginoso comprobar cómo avanza la tecnología en los deportes y en sí mismas. Y cómo ahora somos capaces de practicar ciertos deportes gracias a programas informáticos y softwares.
Aquellos a los que le sepa a poco esta experiencia de realidad virtual siempre puede adentrarse de forma física y real en la cordillera del Himalaya y trepar hasta la cumbre del Everest.
Fuente: salyroca