El nuevo primer ministro Ulf Kristersson no está prestando atención a la agenda verde. Rápidamente eliminó todo el Ministerio de Clima y Medio Ambiente, marcando la primera vez en 35 años que Suecia no tiene un ministerio climático específico. La gente llora que el mundo se derrumbará sin la financiación de los burócratas que fingen tener la capacidad de alterar el ciclo climático con la financiación suficiente.
Los planes de Klaus Schwab para la Agenda 2030 están en peligro. “Los problemas ambientales se verán en desventaja al mismo tiempo que tenemos un gran desafío en Suecia en lo que respecta a la biodiversidad y la silvicultura”, afirmó Karin Bäckstrand, profesora de la Universidad de Estocolmo. “No cumpliremos los objetivos de la Agenda 2030 sobre biodiversidad”.
El líder demócrata Ebba Busch será el nuevo Ministro de Energía, y la liberal Romina Pourmokhtari, de 26 años, será la Ministra de Clima y Medio Ambiente. Los Demócratas Nacionalistas de Suecia no apoyan el objetivo de lograr cero emisiones netas.
En cambio, el nuevo gobierno está dando prioridad a las iniciativas de energía nuclear que harán que sea cada vez más difícil cerrar las plantas existentes mientras se utilizan 36 000 millones de euros para construir nuevas centrales nucleares. El nuevo gobierno también está considerando reabrir dos plantas de energía nuclear que descontinuaron sus operaciones en los últimos años. Otro ejemplo más de cómo la Agenda 2030 y el plan de Schwab para cambiar el mundo fracasarán.