Sinopsis de la obra
Una modelo de diecisiete años a la que le falta el ombligo desaparece en Madrid. Los inspectores Martínez y Pieldelobo se hacen cargo de la investigación, pero chocan desde el primer momento. Él es un padre cincuentón y caótico, tierno pero mordaz y un tanto anticuado; ella, una milenial combativa, inteligente y feminista.
Mientras recorren por España lugares misteriosos y templos en apariencia tranquilos, surgen dos hipótesis para desenmascarar a un asesino en serie: o la mafia rusa está detrás de una red de prostitución de lujo o hay un psicópata religioso que pretende enmendarle la plana al mismo Dios.
Reseña de Donde haya tinieblas
En la era de la inmediatez, del consumo desaforado, parece que todo, incluyendo a las novelas, debe engancharnos desde el comienzo. Más a mí, que desde hace un tiempo decidí tomar la decisión de no terminar una novela si no me enganchaba, algo que me parecía un sacrilegio años atrás.
En la era de las redes sociales encontramos al inicio de esta novela una frase que puede herir sensibilidades: «Las redes sociales son una mierda». Más a mí, que pese a dedicarme profesionalmente a gestionarlas estoy en una época de recelo y hastío respecto a hashtags y demás términos. Una fatiga social: la de observar vidas de amigos y conocidos desprovistas de autenticidad. Sí, posiblemente las redes sociales son una mierda.
«Las redes sociales son una mierda».
Por otro lado, la religión, reflexiones sobre la maldad y la condición humana. Más a mí, que acabo de cruzar la complicada frontera de la cuarentena, dejando atrás más crisis de las que me atrevo a reconocer. Redes sociales y religión —solo falta el fútbol— como el opio que alimenta a una sociedad que parece condenada al fracaso.
Manuel Ríos San Martín consigue un trhiller impactante, con algunos pasajes que precisan dejar el libro en la cama durante unos segundos para retomar aliento.
Eso sí, con el alivio cómico de un personaje brillante y bonachón (el inspector Martínez) el cual nos narra la historia desde un punto de vista sugerente, que invita en todo momento a la reflexión.
La inspectora Pieldelobo atractiva por dentro y por fuera, una especie de Lisbeth Salander que me ha entusiasmado. Protagonista muy potente que se une a otros personajes secundarios y tramas que dibujan una historia apasionante y llena de matices.
Lo mejor, sin duda, los diálogos de los protagonistas recorriendo en coche España en busca de un posible asesino múltiple que emplea escenarios religiosos de nuestro territorio —para mí desconocidos pero con el deseo firme de querer visitarlos— , recuerdan a esas largas conversaciones entre Rust y Marty con Lusiana de fondo en True Detective.
Una prosa sugerente y sencilla. Pero sin evitar la confrontación y la reflexión por parte del lector. Al fin y al cabo se desgranan muchos temas al tiempo que perseguimos la solución de un enigma caleidoscópico cuyas pistas comienzan a encajar a la perfección.
Confrontación como tema principal de Donde haya tinieblas, porque la sociedad actual es el reflejo del choque de trenes generacional de los dos inspectores. El desmembramiento provocado por la brecha digital que deja a la población dividida ante un inmenso acantilado difícil de superar.
Personajes complejos e interesantes que consiguen entrar con facilidad en nuestras estancias, y eso es algo de agradecer. Como también lo es el lenguaje sencillo y ágil, o el uso de apodos para todos los personajes, recurso tan socarrón como útil para los que nos perdemos en la marea de nombres en que se quieren convertir algunas novelas del género. ¿He dicho ya que he cumplido la cuarentena y mi memoria no es la que era? Pues eso, gracias.
«Que suerte tenéis los policías ahora, el trabajo os lo dan hecho con tanta cámara y tanto móvil. ¡El mérito era descubrir un crimen en la Edad Media, sin ADN ni nada!».
No te pierdas nuestra entrevista a Manuel Ríos San Martín, autor de la novela.
Datos de publicación
Título: Donde haya tinieblas
Autora: Manuel Ríos San Martín
Editorial: Planeta
Año: 2021
528 páginas para reflexionar, reír y disfrutar
Calificación:
Fuente: https://www.elquintolibro.es