“Cuando vivas solo, decidirás tus propias reglas.” Esta era la cantarina que oíamos a nuestros padres, que todavía algunos oímos y que siempre queremos dejar de escuchar. Una amenaza con una promesa dentro: “ojalá llegue pronto ese momento de vivir solo.” Y de pronto, para algunos, llega ese primer trabajo, la universidad. Un empujón que nos permite plantearnos si ese será el momento de vivir a nuestra manera. Y, luego, llega la realidad. Los precios de alquiler de las viviendas son una bofetada de realidad. Y un insulto, también. En Madrid, en Barcelona o en cualquier capital occidental, vivir en una ciudad cosmopolita trae consigo: alquileres imposibles y la imposibilidad de ser independiente.
Pero, delante de esta situación abusiva, podemos hacer dos cosas: guardar silencio o levantar la voz. Y desde Madrid nos llega este proyecto creativo para exponer una realidad en la muchos nos vemos identificados. Y dentro de esta gran urbe, hay unos metros cuadrados que son de oro: los del barrio de Malasaña.
Para llevar a cabo esta denuncia, la escuela de arte Brother Madrid, ha impulsado una campaña que lleva el hashtag #STOPM2DEORO y que se trata de carteles, repartidos por todo el barrio, con frases mofándose de la ridiculez de los alquileres hoy en la zona. Así, cuando paseamos tranquilamente por el barrio, vemos los míticos carteles de “Se alquila” en esquinas, árboles y papeleras, con anuncios como el siguiente: “parcela de árbol por 900 euros y un ojo de la cara” y a continuación una petición de queja con el hashtag. Una inclusión de las redes sociales, y de los ciudadanos, en una queja colectiva para intentar paralizar este auge insostenible, donde hoy, alquilar un piso de 8m2 cuesta alrededor de 900 euros al mes. Todo eso, y con alquileres donde la vivienda no está ni en condiciones.
Una situación que podríamos extrapolar a Barcelona, y una reivindicación que podríamos adoptar los que vivimos en ella. Es necesario alzar la voz, defender derechos básicos, como es la vivienda. Y hoy las viviendas son un negocio, no un derecho. Aplaudimos a #STOPM2DEORO por encontrar su voz. Bravo.
Fuente: Lomono